¿SE NOS VIENE OTRO TOMPKINS?

por Gustavo Burton


Aarón Sanger es el nombre del director de Forest Ethics, una de las muchas fundaciones ecologistas internacionales, que el último tiempo ha salido a la palestra pública gracias a declaraciones polémicas en una supuesta defensa del medio ambiente y por sus iniciativas que combinan la ecología con los negocios.

Este polémico ambientalista, ha puesto su foco comercial y ecologista en nuestro país, aliándose con la Fundación Chile para desarrollar un proyecto empresarial que comercialice en Estados Unidos productos elaborados con madera.

¿Intervencionismo ad portas?

La historia nos indica que ecologistas como Aarón Sangler comienzan sus acciones de formas poco sutiles, tratando de acaparar pantalla y titulares para hacerse conocidos o posicionarse de forma rápida, alcanzando buenos niveles de audiencia para sus “proyectos ecologistas”, ahí está el caso de Douglas Tompkins, que a poco andar entró en conflicto con empresas, forestales, salmoneras y hasta con el mismo gobierno, cuando comenzó su compra de terrenos en el sur de nuestro país.

La historia acá no es nueva y nos debería preocupar a todos, pues Sangler, a través de su fundación ecologista, ya han logrado que la CPMC y Forestal Arauco se comprometieran públicamente a conservar el bosque nativo, en un claro ejemplo de la influencia que puede alcanzar su acceso a medios masivos.

Ciertamente, Aarón Sangler también estará siendo apoyado en esto por la concertación (los entreguistas de siempre) y la derecha (los vende patria de siempre). A diferencia de los nacionalistas que jamás apoyarán la intervención foránea de estos autoproclamados “mesías ecológicos”.

La pregunta es ¿cuál será el límite para este verdadero intervencionismo verde” estarán dispuestas las industrias que explotan los recursos naturales de nuestro país, y que dicho sea de paso, dan trabajo a miles de chilenos, a atarse de manos para no ser víctimas de las denuncias públicas o desmedros en su imagen comercial?.

Usando los Mass Media

El uso de la opinión pública (o mejor dicho opinión publicada) y la prensa amarillista, ávida de polémica es un arma útil en manos de estos supuestos defensores del medio ambiente, es lógico, El hecho que estos “ecologistas” busquen el apoyo de medios masivos nacionales e internacionales, es una estrategia muy adecuada para apoyar su intervencionismo sobre las empresas e industrias nacionales y alcanzar así sus objetivos, pues de esta manera pueden lograr fácilmente ser generadores de opinión (o simplemente llamar la atención) y presionar a las empresas nacionales, con la llamada opinión pública.

Este ejemplo es más claro considerado lo realizado hace un tiempo atrás por Douglas Tompkins cuando acusó públicamente a la industria del salmón de dañar las costas y fondo marino, en condiciones que muchas de estas empresas ya habían adoptado las normativas ISO sobre manejo medioambiental. A la vez de representar un polo de desarrollo económico para las personas de las zonas en que se encuentran.

¿Un nuevo Tompkins?

Qué es lo que pretende este nuevo actor del ecologismo internacional, tal vez hacerse del posicionamiento necesario para impulsar más compras en el sur de nuestro país, tal vez viene a ayudar a un desgastado y cuestionado Douglas Tompkins, o quizás a hacer un buen negocio con la madera de nuestro país o quizás siguiendo el ejemplo de su antecesor, Sangler construirá una barraca de madera como la de Vodudahue o una pista de aterrizaje como la de Palena.

Por lo pronto, habrá que estar alerta para seguir los pasos de este nuevo “filántropo medioambientalista”. Sin pretender anticiparme a los hechos planteo aquí algunas posibles acciones que delatarán las verdaderas intenciones de Aarón Sangler:

1.- Establecer nuevas polémicas o denuncias contra empresas nacionales (salmoneras, forestales, centrales hidroeléctricas).

2.- Establecer un centro de operaciones u oficina en Chile para su empresa, esto se haría convenientemente en una ciudad del sur de nuestro país.

3.- Buscar el apoyo de políticos o autoridades. Obteniendo, sin lugar a dudas, el apoyo de la concertación y la derecha empresarial.

4.- Comprar terrenos en el sur de nuestro país para desarrollar su proyecto de empresa sustentable. Vender bonos carbono, bonos agua u otro tipo de “bonos verdes”.

5.- Instaurar una “comunidad ecológica” en el sur de nuestro país para desarrollar sus “empresas sustentables”, produciendo “productos naturales” o de madera nativa.

Estos pasos futuros serán claves para determinar lo que al final resultará obvio para todos: Aarón Sangler es un agente más al servicio del cartel verde internacional, otro actor del ecologismo mundial que viene a contribuir al proyecto Gondwana y a hacerse del dominio de valiosos territorios al sur del paralelo 40. Habrá que estar muy atentos.

Polémico ambientalista crea empresa para explotar bosque nativo
LUN, Jueves 27 de octubre de 2005
Mario Álvarez
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Foto: Raúl Inzunza

Hace cinco años, en el diario estadounidense The Wall Street Journal, apareció un aviso que pedía que las comercializadoras de madera exigieran una certificación de buen manejo ambiental a sus proveedores, especialmente a los chilenos, acusando destrucción de bosque nativo.

El impacto fue inmediato y le siguieron protestas frente a las tiendas de Home Depot, uno de los mayores compradores de madera chilena.

Detrás de todo estuvo Aaron Sanger, director de la fundación Forest Ethics, quien al final logró que la CMPC y Forestal Arauco se comprometieran públicamente a conservar el bosque nativo y no reemplazarlo por plantaciones.
Ayer, sin dejar de lado su objetivo inicial, Sanger demostró que está buscando nuevas estrategias para cuidar los bosques. En vez de ir al choque, prefirió aliarse con la Fundación Chile para crear una empresa que venda productos elaborados con esta madera en Estados Unidos, garantizando su buen manejo.
"Actualmente los pequeños propietarios no tienen incentivos económico para cuidar el bosque nativo que poseen, incluso les significa una molestia, entonces lo queman para destinar el terreno a agricultura. Esperamos cambiar eso", explicó Sanger.

La apuesta del ambientalista es que esta empresa, Eco-Management, al garantizar el buen manejo, logre que los consumidores estén dispuestos a pagar más por estos productos.

"En esta empresa Forest Ethics ayudará a seleccionar los lugares precisos que se pueden explotar y además prestará su marca para los productos, para que el consumidor compre con confianza", dijo.

 

Centro Informativo de ALERTA AUSTRAL - Santiago de Chile - http://www.alertaaustral.cl - 2005